El día que me decidí a ser abogada

        (o en qué estaría yo pensando)

Un día aciago de verano, hace ya..... ni me acuerdo cuántos años ni tallas, tenía yo 17 añitos recién cumplidos, una talla 40 de pantalón, 1 metro 72 centímetros de estatura, la melena negra como el tizón que me llegaba a mitad de espalda, y las hormonas revolucionadas, ese día, digo decidí hacerme abogada.

Bonita carrera, sobre todo vocacional,............... la lucha fuera y dentro de los juzgados por los derechos de los oprimidos y de los maltratados con la toga al viento ..........

¿Por qué no pensé en los clientes?
Esos benditos que te mienten por sistema, que no pagan, que te llaman a horas intempestivas porque están nerviosos, que hacen lo contrario a tus consejos, que no te respaldan sus decisiones, que son caraduras profesionales, que te aportan documentos falsos, que esperan que hagas el milagro por poco precio y sin importar la cabeza que debas cortar.

¿Por qué no pensé en los recibos?
Esos que llegan todos los meses y que debo pagar con las minutas que no cobro.

¿Por qué no pensé en los "compañeros"?
Esos que tienen que pagar sus recibos con las minutas de sus clientes a los que no les importa como hacen sus abogados el milagro .............

Diréis que, cuando uno tiene vocación por una profesión esas cosas no se las plantea, y menos con el idealismo de los 17 años.
Pues no, siento desilusionaros, lo cierto es que estaba yo de vacaciones en Cádiz, (muy merecidas después de aprobar COU con notas). Fui a casa de mi abuelo y allí estaba mi tío Cristóbal, abogado de profesión y aunque lo quiero mucho, tiene un carácter endiablado y haciendo una gracia de las suyas me dijo:
¿TU QUE VAS A HACER AHORA, FILOSOFIA COMO TODAS LAS NIÑAS?

¡No, gili.......! ¡derecho como tú!, le contesté
Y de la misma me matriculé en derecho .....Y es que ya os lo dije yo tenía 17 años y las hormonas descontroladas,

¡¡Ojalá las hubiera sujetado a tiempo!!, ahora sería vendedora de camisas o locutora de radio local o lo que es mejor ¡mujer florero!, ¡¡ESO!!, en mi próxima vida seré mujer florero.

Perdonad el exabrupto pero hoy he hecho tres demandas, he recibido a 4 clientes y me han devuelto dos cheques impagados.
¡¡¡Ahhh!!! y tengo una talla 50 de pantalón (camino de la 52)


La Tía Chaty

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