Los profesionales en los medios de comunicación

Quiero que el rotulo de esta nota se entienda bien, digo: "Los profesionales EN los medios de comunicación" y no: "DE los medios de comunicación", pues hay una gran diferencia.

Los segundos son aquellas personas que han dedicado su vida a los llamados "Medios de Comunicación Masiva", para englobar en una sola expresión a la Televisión, la Radio, los Periódicos, las Revistas y otros que cada país tendrá incluidos.

Son mujeres y hombres estudiosos o prácticos, buenos, malos o regulares, de las técnicas de la comunicación en los medios masivos de la ídem, que tamizan los acontecimientos para que el público se entere, los digiera, los critique, los imite y todos los "los" que quieran.

Pero los primeros los "profesionales EN los medios", eso es otra cosa. Mejor dicho, son otra cosa.

Y me estoy refiriendo a las mujeres y hombres profesionales de... de lo que sea.. que van desde médicos generales hasta escribanos (*) , pasando por veterinarios, odontólogos, abogados, arquitectos, ingenieros (de todas la ramas y cepas), oftalmólogos, etc., etc., y podría ocupar mucho sitio nombrando las profesiones mediatizadas.

Enciendes la televisión y no hay canal que se precie que no tenga en su programación un profesional "de algo" para que opine de ese "algo", incrustado en cualquier programa de no importa que.

Pasa lo mismo con la radio, que tienen a los profesionales "decualquiercosa" con una columna para que opinen.-

En lo personal esto me da una sensación de tristeza.

Tantos años de esfuerzo en la universidad para ver cumplido el sueño de la vocación, para terminar frente a una cámara de televisión o a un micrófono, dentro de esa caja de Pandora que suele ser un programa en un medio de comunicación masiva, mezclando las explicaciones sobre las técnicas para la fecundización asistida con los comentarios periodísticos sobre el último romance de la vedette de moda.

Vemos, los programas donde hay concursos con el público en los cuales puedes ganar un coche, un piso o una lavadora si aciertas cuantas canicas hay dentro de una cacerola, a los escribanos.

Al menos en mi país (supongo que en otras partes del mundo también), en esos programas donde el publico "oyente" concursa, es obligatorio que la transparencia del concurso este supervisada por un escribano.

Entonces encontramos señores (a veces también señoras) muy compuestos, cuya misión es poner su "matricula" que lo habilita a "dar fe" de cualquier acontecimiento, apareciendo en pantalla "dando fe" sobre el numero que obtuvo el premio o sobre la transparencia del juego.

(No me explico porque, las cosas deben hacerse con honestidad sin necesidad de un actuario que lo obligue)

Y no se quedan ocultos detrás de cámaras, no, que va!, les encanta aparecer y que los vean.

Los médicos merecen un párrafo aparte.

Creo que hay muy pocos programas, especialmente aquellos llamados "magazines", que no tengan un medico en su equipo.

Y allí estará la/el profesional de la medicina, hablando sobre como se hace un transplante de riñón o cual es la mejor receta para no sufrir de reuma y los oyentes o televidentes tratando de entender, en esos "mini-segundos" (el tiempo en los medios es tirano!!!) algo de lo que no tiene la menor idea y tampoco la tendrán cuando deje de hablar el galeno frente a la cámara o al micrófono y se quedarán con mas dudas que Tarzán viendo "Jurassic Park".

Otros que merecen buen espacio aquí son los Veterinarios. Siempre con un cachorro en los brazos que arranca los suspiros de la platea, intentará explicarnos como darle una aspirina a un gato, pero sin una demostración práctica, desde ya, no sea que pierda la paciencia en cámara.

Cuando, aquellos que tenemos mascotas en casa, queremos saber más sobre problemas que pueden padecer nuestros pequeños monstruitos del hogar, el Doctor nos dice: "no deje de consultar con su veterinario de confianza" y nos deja mas confundidos que antes.

Y así podría seguir hasta el infinito: los arquitectos/as hablando de cómo decorar una casa, con explicaciones que la señora que esta mirando jamás podrá llevar a la práctica porque para eso debería demoler su piso o asaltar un banco para poder armar un jardín francés en su balcón con piso de piedra italiana y cubrir su sala con alfombras de Smirna.

Y el/la arquitecto/a, con sus casi cinco años de universidad, recorre la "casa ejemplo" explicando como se construye.

Sobre lo que tengo dudas es si alguna vez habrá construido alguna…

¿Y el abogado/a? dando consejos sobre divorcios, herencias, calumnias e injurias, utilizando términos jurídicos y con cara de "Sherlock" o de "Perry Mason", explicando el estado de la investigación del último crimen que aparece en las noticias.

Por eso es que quiero diferenciar el titulo de esta nota: los profesionales EN los medios, que quieren ser profesionales DE los medios, y están tan lejos de ello como las antípodas.

También quiero llamarlos a la reflexión:

Es verdad que en los tiempos que corren, todo aquello que signifique un ingreso extra de dinero (honradamente se entiende) está muy bien.

Pero también es verdad que las profesiones que se adquieren en los claustros universitarios hay que dignificarlas, deben desarrollarse en los ámbitos que corresponde para cada una y no bastardearlas tratando de mimetizarlas con bambalinas, coristas y cómicos. Porque son dos cosas diferentes.

Las coristas, los cómicos y todos los que hacen programas en los medios de comunicación masiva, son tan profesionales como un medico o un escribano, pero la diferencia la hace que ellos están en "su medio", en el medio que les corresponde para llegar a la gente: los otros, los advenedizos, están fuera de su lugar.

Hasta la próxima desde el Sur.

Lica

Buenos Aires, octubre 2008

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