San Isidro 2005
6ª Corrida de feria, 16-5-2005, Plaza de toros de Las Ventas del Espíritu Santo. | |
Toros | Novillos de: Fuente Ymbro: Encaste: Jandilla. |
Terna | Gabriel Picazo: De
Nazareno y oro. Pinchazo y estocada baja. Casi entera,
atravesada y baja. El novillo fue aplaudido en el arrastre
con petición de vuelta. Sergio Marín: De Azul añil y oro. Estocada al rincón de Ordóñez. Tímidos aplausos para el novillo en el arrastre. Media delantera y perpendicular. Un descabello. Silencio. Alberto Aguilar: De malva claro y plata. Trasera. Oreja. Hubo petición de vuelta para el novillo y fue aplaudido en el arrastre. Pinchazo hondo y trasero. Silencio. |
Presidente | D. César Gómez Rodríguez |
Comentarios | Llegó la casta a Madrid |
Tarde de aniversario. Durante toda la vida taurina que tengo en mi haber, siempre se ha guardado un minuto de silencio al terminar el paseíllo con las cuadrillas formadas en el ruedo en recuerdo por el día de la muerte de Joselito, El Gallo, uno de los impulsores de la construcción de la plaza de Las Ventas. Ayer el servicio de la plaza se retrasó en la comunicación por megafonía del evento y cuando lo hizo cada uno estaba ya pensando en lo que esperaba en los chiqueros y ensayando el toreo de salón sobre el albero. Antes de terminar el minuto de silencio, una voz del tendido llamó inútiles a todo aquel que se sintiera relacionado con este hecho. A lo hecho pecho y aquí queda reflejado. Y llegó con los novillos de Fuente Ymbro, como viene ocurriendo desde unas temporadas. Los novilleros, con ellos, demostraron una vez más hasta donde pueden llegar en este difícil oficio del planeta de los toros. Si complicado es torear lo que sale descastado y manso, peor es que un buen toro descubra a un mal torero. Algunos novillos tuvieron su grado de complicación, pero casi todos se dejaron torear destacando los lidiados en tercer y cuarto lugar por casta y bravura, y eso presenta un inconveniente para el torero de hoy. Estos dos novillos le tocaron en suerte a Alberto Aguilar y a Gabriel Picazo. El primero le cortó una oreja a su primero, tercero de la tarde, pero Gabriel Picazo se fue de vacío al no saber aprovechar las condiciones de su enemigo. ¡Fue una pena!. El primero de la tarde trajo en jaque a su cuadrilla, ya que recortaba por el pitón izquierdo y a punto estuvo de costarle un disgusto al torero de plata Miguel Velasco. Sin embargo, El Madrileño tuvo que saludar montera en mano después de parear en dos ocasiones a su enemigo, eso sí, tuvo que aguantar mucho en el segundo par. Es decir, que nadie le regaló nada. El único defecto que se le vio al novillo es que se quedaba corto en la embestida. En la pelea con los montados no se pudo apreciar su casta ya que fue muy mal picado. El cuarto de la tarde tenía mucho recorrido con el capote, pero Gabriel Picazo estuvo vulgar con él. Con los montados estuvo codicioso y empujó con fijeza, pero el del castoreño le tapó la salida y le zurró la badana sin medida. Destacó Juan Luis de los Reyes con los palitroques. En el último tercio comenzó la faena citando de lejos y al dar el pase de las flores a punto estuvo de costarle un disgusto al no aguantar la embestida del burel. El novillo repetía como un carretón y metía la cabeza que daba gusto pero el torero no estuvo a la altura de las circunstancias. Es decir, el novillo salió con las dos orejas casi cortadas, pero… El segundo de la tarde fue muy mal lidiado por Montoliú, que no tuvo su día, y es una pena porque es un gran banderillero y un gran peón. En varas manseó, aunque no fue bien picado y durante la lidia, como digo, le dieron muchísimos capotazos y eso al final se paga. El novillo llegó algo descompuesto al último tercio y el novillero no tuvo los suficientes recursos para corregirle los defectos. Al segundo de su lote le recetó de salida muchos capotazos y ninguno bueno. Con los caballos dio buen juego, aunque recibió mucho castigo. Sin embargo, con la muleta se le vio verde, no tiraba del novillo y este necesitaba alguien que le indicara por dónde tenía que ir y a eso no están acostumbrados estos toreros. El tercero destacó en su juego
con el picador. Fue de largo pero en la primera vara
se le fue la mano y casi lo pica en la cabeza. En banderillas
fue aplaudido el banderillero Jesús Delgado.
Durante la faena de muleta el único defecto que
le encontré fue que no se cruzó, y que
tuvo la oportunidad de dar algunas series de cinco o
seis muletazos porque el novillo las aguantaba, pero
tienen la costumbre de cortar las series al segundo
o tercer pase. ¡Qué manía!. Más crónicas taurinas de
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